En el mundo del running, como en cualquier ámbito, existen una serie de mitos y falsas creencias que a menudo son tomados como verdades incuestionables. Estas creencias erróneas pueden influir en la forma en que los corredores abordan su entrenamiento y su relación con este apasionante deporte. En este reportaje, desvelaremos y desmentiremos siete de los mitos más comunes sobre el running.
1. Si corres justo por la línea en una Maratón haces el recorrido más corto. Es común escuchar esto, sin embargo, este mito es falso. Los organizadores de las maratones cuidadosamente miden y certifican las rutas para asegurarse de que tengan la longitud exacta de 42.195 kilómetros. Correr por la línea puede hacer que tengas que esquivar a otros corredores y hacer zigzags, lo que en realidad te hará perder tiempo y energía. En lugar de buscar atajos, es importante mantener una línea de carrera eficiente y mantener un ritmo constante para alcanzar tus objetivos en una maratón.
2. Correr es malo para las rodillas. Uno de los mitos más arraigados en el running es la idea de que correr causa daño a las rodillas. En realidad, varios estudios han demostrado que el running, cuando se practica de forma adecuada, puede fortalecer las articulaciones y reducir el riesgo de enfermedades degenerativas. La clave está en mantener una técnica adecuada y no excederse en el entrenamiento.
3. Necesitas correr todos los días. Correr a diario puede ser contraproducente. El descanso es esencial para la recuperación y previene lesiones. Un plan de entrenamiento que incluya días de descanso es igual de importante que los días de running.
4. Solo los delgados pueden correr rápido. No existe un «cuerpo ideal» para correr. La velocidad y la resistencia no están vinculadas exclusivamente al peso. Corredores de todos los tamaños han demostrado ser igual de competentes y exitosos en este deporte.
5. Beber agua durante el running provoca calambres. La deshidratación es más probable que provoque calambres que beber agua durante la carrera. La hidratación adecuada es esencial, especialmente en condiciones de calor.
6. El running no es apropiado para personas mayores. El running puede ser una actividad beneficiosa para personas de todas las edades, incluyendo a aquellos que son mayores. De hecho, numerosos estudios demuestran que el running puede mejorar la salud cardiovascular, la fuerza muscular, la densidad ósea y la función cognitiva en personas mayores. Por supuesto, es importante adaptar el plan de entrenamiento a las necesidades individuales y tener en cuenta cualquier condición médica existente, pero el running es una actividad que puede disfrutarse a lo largo de toda la vida.
7. Debes estirarte antes de correr. A menudo se ha recomendado estirar antes de correr para evitar lesiones, pero la evidencia científica sugiere lo contrario. Los estiramientos estáticos antes del running pueden disminuir la potencia muscular y aumentar el riesgo de lesiones. En lugar de ello, es más efectivo realizar ejercicios de calentamiento dinámico, como movimientos de movilidad articular, para preparar los músculos y articulaciones antes de la carrera. Los estiramientos estáticos son más apropiados después de correr para mejorar la flexibilidad y reducir la tensión muscular.
En resumen, desmitificar estos mitos sobre el running es esencial para disfrutar plenamente de este deporte. La verdad es que el running es una actividad inclusiva, beneficiosa para la salud y emocionante. Al eliminar estas falsas creencias, los corredores pueden aprovechar al máximo su pasión y su potencial.